Crudo Editorial: El Plan Nacional de Desarrollo del Gobierno Petro ¿Qué trae para el sector energético?

El Plan Nacional de Desarrollo del Gobierno Petro ¿Qué trae para el sector energético?

 

 

En las últimas semanas el Gobierno de Gustavo Petro presentó el proyecto de ley sobre su Plan Nacional de Desarrollo (PND), que es la hoja de ruta de su administración para el periodo 2022-2026. El PND se estructura sobre cinco transformaciones, las cuales son: ordenamiento territorial alrededor del agua, seguridad y justicia social, derecho humano a la alimentación, transformación productiva,  internacionalización y acción climática y transformación de convergencia regional. Este PND contempla una inversión de 1 154 billones de pesos para el próximo cuatrienio y se desarrollarán tres ejes transversales,  la paz total, la diversidad de actores como fuente de desarrollo y el mantenimiento de la estabilidad macroeconómica.

 

 

Este documento de más de 150 páginas traería diversos cambios en sectores como la seguridad y el extractivo.  También, se pretende crear un nuevo sistema para focalizar a la población en condición de pobreza y vulnerabilidad. Con respecto al tema energético, este articulado es el que tiene la mayor cantidad de propuestas, 44 artículos relacionados a estos asuntos. Un tema lógico dado que una de las principales consignas de este Gobierno es la búsqueda de una transición energética y cambiar el modelo extractivista tradicional. 

 

 

Dentro de los objetivos del apartado Hacía una sociedad movida, por el sol, el viento y el agua está la prohibición de la minería de gran escala a cielo abierto para el carbón térmico, la sustitución de leña, carbón y residuos por energéticos de transición, reasignación de subsidios de energía eléctrica para cubrir y garantizar el consumo (focalizados para hogares vulnerables de los estratos 1 y 2) entre otros aspectos. 

 

 

Igualmente, temas claves para el sector que se podrían destacar de estos apartados se relaciona el apoyo y el desarrollo de tecnologías como la eólica y la del hidrógeno, fortalecimiento con las comunidades energéticas, reglamentaciones con el fin de incentivar la generación de energías renovables no convencionales como solar y eólica.  

 

 

Según el texto se crearán entidades como por ejemplo Foncesar (Fondo Nacional Corredor de Vida del Cesar), Fonte (Fondo Nacional para la Transición Energética) y Fone Energía (Fondo único de Soluciones Energéticas). Además, se pretende ser líder regional en el cuidado de la Amazonía y de la transición hacia energías limpias con el fin de cuidar el medioambiente y avanzar en la deforestación.

 

 

Estas propuestas planteadas para estos asuntos en el PND son necesarias para estar acorde con las apuestas internacionales en materia ambiental y estar en sintonía con el avance de la transición energética; sin embargo, preocupa cómo se van a cumplir estas ambiciosas propuestas y de nuevo preocupa la visión del Gobierno en cuanto al sector extractivo. Como siempre, surge la discusión sobre la importancia de este sector y lo indispensable de estas actividades para las finanzas del país.

 

 

Indiscutiblemente junto con las apuestas dentro del PND para avanzar en las energías limpias, el Gobierno Petro debe informar de manera transparente y responder, ¿cuál es el criterio para tomar la decisión de suspender o continuar las exploraciones o explotaciones de petróleo y gas?, ¿Cuál es el camino para lograr la transición? ¿Cómo se va reemplazar las utilidades e ingresos que genera este sector en las finanzas del país? Y ¿Cómo se va iniciar una transición laboral y una transición productiva en territorios donde hay tradición petrolera? 

 

 

La hoja de ruta que se da gracias al PND puede ser el inicio para que la ciudadanía conozca los parámetros y el camino de la transición energética; un tema que tiene muchas preguntas sin resolver, genera incertidumbre y que está en la mayoría de las discusiones nacionales e involucra a otros sectores del país. El énfasis para los debates sobre los articulados energéticos debe estar encaminado en la necesidad de fortalecer el uso de las energías renovables, pero de manera gradual. La agenda de Petro en cuanto a transición no se puede hacer en el corto plazo.