ABRIL 15 DE 2019: BOLETÍN DE LA INDUSTRIA PETROLERA

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Columna de opinión semanal

Las conclusiones de la Comisión: la importancia de la licencia social

Iniciando abril de 2019, la Comisión de Expertos para el Estudio del Fracking designado por el Gobierno, presentó el informe completo y las conclusiones para evaluar la fase exploratoria de hidrocarburos en yacimientos no convencionales (YCN). Vale la pena rescatar que este grupo en febrero había entregado unas recomendaciones previas para seguir desarrollando exploraciones en los YCN, y también avanzar en la realización de proyectos pilotos de investigación para el fracking.

Para tener en cuenta, este grupo utilizó la siguiente metodología para llegar a las conclusiones del texto: mesas regionales, en las que la Comisión se reunió con habitantes de las cabeceras municipales de San Martín – Cesar, Puerto Wilches y Barrancabermeja – Santander; revisaron la normativa actual, para formular  el marco regulatorio técnico y ambiental en la etapa de exploración de este método y realizaron un análisis de la seguridad petrolera nacional.

En el documento de 273 páginas sobresalieron los temas de: participación ciudadana y licencia social, entorno geológico, ecosistemas y biodiversidad, contaminación de agua y atmósfera, actividad sísmica, salud pública, capacidad institucional, experiencias internacionales, entre otros aspectos con relación a la implementación de esta técnica en los territorios. De hecho, en el texto se puede evidenciar que la conclusión principal de esta Comisión para realizar este tipo de actividades, es la necesidad de crear confianza durante la ejecución de los pilotos con las comunidades locales, es decir, contar con una licencia social.

Principalmente, aclara que existe desconfianza en la capacidad institucional y afirma que esto se debe a la falta de información que emiten las entidades gubernamentales; adicionalmente, no hay certeza en cómo se tramitan y se emiten las concesiones para la extracción de crudo, ni cómo se realiza el seguimiento a las licencias ambientales. Según establecen, es imperativo crear ese mecanismo de confianza y transparencia antes de pensar en realizar estas labores.

El tema de la licencia social siempre ha pasado a un segundo plano cuando se pone en práctica las actividades extractivas, y si las empresas y el Gobierno quieren obtener la confianza suficiente con las comunidades y lograr esta aprobación, el primer paso es ajustar la normatividad actual en materia social y ambiental, ya que hasta el momento los habitantes de estas regiones no sienten que sea suficiente la reglamentación existente en cuanto a los riesgos, responsabilidades y beneficios que estas labores pueden traer para sus territorios. Un segundo paso, es que las compañías y el Estado presenten toda la información que tienen sobre el uso de esta técnica, es decir, que sean transparentes con las comunidades.

El Gobierno y el gremio petrolero han hablado mucho sobre el uso de esta técnica: características, beneficios a largo plazo para la seguridad energética y lugares donde se va a implementar. Las conclusiones finales de la Comisión les puede dar una visión más amplia sobre la implementación del fracking; sin embargo, estas recomendaciones no son una “verdad absoluta”.

Documentos como los de la Contraloría en los que se afirma que Colombia todavía no está preparada para su puesta en marcha, y el libro “La prohibición del fracking en Colombia como un asunto de política pública” realizado por Heinrich Böll Stiftung y La Asociación Interamericana para la Defensa de Ambiente (AIDA), en la que expertos hicieron estudios científicos sobre los riesgos de su uso, contienen elementos importantes que se deben tener en cuenta  para abrir espacios de debate, para que el Gobierno y las empresas respondan claramente a cada una de las negativas planteadas.

Esto demuestra que aún hay un camino muy largo para tomar una decisión final sobre este método, aunque la Comisión hizo un avance importante al aceptar la necesidad de la licencia social en estos territorios. Sin embargo, esto no se debe quedar solo para la implementación del fracking, la licencia social ha sido un tema fundamental en varios procesos de la industria de los hidrocarburos; por ende, es esencial que tanto el Gobierno como las compañías petroleras den pasos pendientes en este sentido, que respondan efectivamente a las preocupaciones de las comunidades, más allá si el uso de esta técnica es aprobado o no.

Noticias

Comisión de Expertos sobre fracking publicó informe final

El grupo de expertos evalúa la idoneidad de impulsar la técnica para Colombia, en un documento final de 273 páginas. Sobresale, dentro de los señalamientos, una importante advertencia: “Uno de los principales riesgos que el Gobierno de Colombia tiene que prevenir está asociado a la dinámica de los conflictos sociales”. Una de las recomendaciones es ganar la “licencia social”, pues esto obligaría a mayores procesos de transparencia sobre cómo se lleva a cabo esta actividad y los recursos que se destinarían a las comunidades.

Para la comisión este permiso debe tramitarse antes de la exploración, debido a que: “Es una condición necesaria para iniciar la etapa de explotación. Un paso inicial para tramitarla es ajustar la normatividad a las exigencias actuales en materia ambiental y social, con lo cual se supera la confrontación entre los intereses locales y nacionales”.

Cabe señalar que se adelantaron mesas de discusión en zonas de influencia de los proyectos como: San Martín, Puerto Wilches y Barrancabermeja, además de revisar una normativa regulatoria y el contexto de la seguridad energética nacional.

Conozca el informe completo de la Comisión en: https://energiaevoluciona.org/static/data/aba.pdf

Vía RCN Radio: Revelan el informe completo de comisión de expertos del fracking. 06/04/19

Colombia sobrepasa producción venezolana de crudo

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) presentó el informe de producción de crudo, en el cual se evidencia una preocupante caída para Venezuela de casi un 30% en la extracción entre enero y febrero. La cifra que apenas pasa los 700.000 barriles por día (bpd), evidencia la difícil situación del vecino país, también en materia comercial y energética.

Colombia logró superarla, con una producción de 892.530 barriles día, según el último reporte del ministerio de Minas y Energía a corte de febrero. Las previsiones que rondan el próximo informe de marzo, indican que la extracción estaría por los 850.000 bpd, que, aún así, compara el pésimo momento del sector en Venezuela.

En Caracas, desde el ministerio del Petróleo, el general Manuel Quevedo asegura que: “Venezuela está siendo objeto de una persecución desde Estados Unidos”, refiriéndose a las sanciones comerciales que la administración de Donald Trump impuso al gobierno venezolano.

Por su parte, el expresidente de Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) José Toro Hardy afirmó que las razones son varias: “Primero hay que hablar de que en 1998, Venezuela producía 3,5 millones de barriles diarios y se encaminaba a una producción de 5,5 millones, una de las más fuertes del mundo y seguir con su posición en América. Ahora en marzo es inferior a 740.000, solo en un mes cayó 28% una de las peores bajas (…) Uno de los principales factores es que Petro Félix (filial de Pdvsa), dejó de funcionar desde los primeros apagones de marzo”.

Vía La República: Por primera vez, Colombia superó a Venezuela en producción de barriles de petróleo. 11/04/19

ELN anuncia cese unilateral al fuego para Semana Santa

Foto: Semana

Por medio de un comunicado, el Ejército de Liberación Nacional -ELN-, dió respuesta a una petición (con fecha del 4 de abril de 2019) de ex negociadores de la iniciativa Defendamos la Paz, en donde solicitaron que se “anuncie lo más pronto posible un cese unilateral de fuego y hostilidades que tenga mayores alcances”.

Así lo asumió el grupo armado no estatal: “Les anunciamos a ustedes y a todo el país, que a pesar de la descomunal ofensiva militar y paramilitar en curso contra nuestras unidades en todo el territorio nacional, realizaremos un cese unilateral de operaciones ofensivas en Semana Santa, que iniciará a las cero horas del domingo 14 de abril y finalizará el domingo 21 del mismo mes a las doce de la noche”.

Sin embargo, dejaron claro que seguirán en alerta combativa, “es decir, solo responderemos si somos atacados, y no realizaremos acciones ofensivas”. De igual manera, reiteraron su postura de “avanzar hacia la paz, de continuar con los Diálogos y la Mesa de Conversaciones, y acordar de manera inmediata un Cese al Fuego Bilateral que genere alivios humanitarios para las comunidades más afectadas por el conflicto”.

Conozca el reporte de marzo concerniente a hostigamientos en contra de la industria petrolera en Arauca, Nariño y Norte de Santander, regiones que cuentan con presencia de este grupo armado no estatal, aquí.

Cabe resaltar que en los últimos días Ecopetrol atendió 2 atentados en zonas donde el ELN registra accionar bélico, uno contra el oleoducto Caño Limón – Coveñas, el cual produjo un derrame de crudo en la vereda Guachimán, Tibú en Norte de Santander; el cual impactó fuentes hídricas de la zona. El otro se evidenció en Barbacoas, Nariño contra el Oleoducto Trasandino (OTA). La empresa trabaja en la reparación de la infraestructura y en la atención de la emergencia mediante su plan de contingencia.

Vía La FM: ELN anuncia cese el fuego durante Semana Santa. 11/04/19

Informe revela posible disminución en compras de crudo por parte de EE.UU. a Colombia

La firma Moody’s (calificaciones crediticias), considera que la autosuficiencia energética de Estados Unidos es uno de los principales factores que provocará una considerable disminución en compras de petróleo a nuestro país. Según el documento, esta decisión surge en un contexto de poca producción del hidrocarburo en la región que afecta la competitividad (sobresaliendo la baja extracción en Venezuela que apenas pasa los 700.000 barriles por día).

Gersan Zurita, Vicepresidente Senior de Moody’s, señaló que: “Estados Unidos se ha convertido en el productor de petróleo más importante del mundo y el impacto en el precio de la producción de Estados Unidos que entra al mercado global de energía puede disminuir los ingresos de los productores de América Latina”.

En el mencionado informe se indica que las exportaciones con destino a Norteamérica, deberán buscar uno alternativo, pero con un horizonte incierto, ya que hay grandes probabilidades que estos nuevos clientes no sean tan manejables como Estados Unidos: principalmente por la calidad de crudo que maneja el sector colombiano y el escenario crítico de seguridad energética.

Vía El Nuevo Siglo: Prevén menos compras de crudo de EU a Colombia. 11/04/19

Realidades extractivas y desafíos nacionales: “Reversing the Resource Curse: Theory and Practice” 



Panel panel multi actor (gobierno, academia y sociedad civil) discute los desafíos de gobernanza de los recursos. Experiencias de Nigeria, Ghana, Myanmar y Colombia.

Del 1 al 9 de abril de 2019 el National Resource Governance Institute (NRGI) junto con el apoyo de Central European University (CEU) -School of Public Policy llevó a cabo el curso “Reversing the Resource Curse: Theory and Practice” en Budapest (Hungría). Crudo Transparente participó de esta novena edición, junto con otros representantes de más de 25 países como Nigeria, Mozambique, Mongolia, Perú, México, Guyana, Mali, Myanmar, Congo, Kenia, Sierra Leona, Ghana, Uganda y Estados Unidos con diferentes desafíos políticos, económicos, sociales y ambientales por delante, pero con el reto común de sostener una economía extractiva, en un menor o mayor grado de dependencia fiscal, participación ciudadana y transparencia política.

El curso destacó por la diversidad del origen de sus participantes y sus distintos roles en prensa, gobierno y sociedad civil. También por el contenido compartido, de alto nivel, de sus facilitadores donde destacan: Robert Conrad, de la Universidad de Duke quien ha trabajado en más de 40 países y ha hecho de su área de experiencia el sistema taxativo con énfasis en multinacionales; Eric Parrado, economista jefe y gerente general del Departamento de Investigación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) desde marzo de 2019; Laury Haytayan quien es gerente del programa regional -MENA (Oriente Medio y Norte de África, por sus siglas en inglés) como oficial superior en el NRGI. Junto con otro invaluable equipo docente como: Dora Fazekas (Cambridge Economics); Andrew Bauer (NRGI); Elisabeth Caesens (Resource Matters); Cristina Corduneanu-Huci (CEU School of Public Policy); Dora Fazekas (Cambridge Econometrics);  Nicola Woodrofee (NRGI); Herve Laso (NRGI) y David Mihalyi (NRGI y CEU).

El curso se desarrolló en 4 módulos principales para capacitar en aras de profundizar la transparencia en el sector y lograr una distribución acertada de los ingresos tras la apuesta extractiva conectando los distintos saber de investigadores, académicos, tomadores de decisión y sociedad civil.

Los énfasis expuestos toman un lugar en “El Diseño de la Cadena de los Recursos Naturales”, que luego de la decisión de llevar a cabo un proyecto y tras las respectivas consultas, se centra en 1. “Descubrir y explotar” con los desafíos de la exploración y la adjudicación de licencias; 2, “lograr un buen trato” sobre los efectos que la decisión de extraer puede llevar en consolidar sistemas de impuestos atractivos para gobierno y empresas, los posibles efectos locales y el rol, en muchos casos predominante, de las empresas estatales de los países de origen; 3, “Administrar los ingresos” entre volatilidad, pagos, ahorro, fondos soberanos, gasto, impuestos y regalías; y por último, invertir para el desarrollo sostenible -sobre sector privado y el gasto del gobierno- entre los actores de interés.

Esto cuando en la mayoría de las realidades sociopolíticas de los países participantes evidencian una concentración del poder en gobierno y compañías, olvidando que los recursos derivados de la explotación son principalmente para beneficio de la gente, cuando se piensa, difusamente, que son para un Estado. Aunque el armazón institucional es indispensable, las comunidades, pequeñas o grandes, no deben estar alejadas de la participación dentro de los intereses vinculados con el extractivismo, ni mucho menos del desarrollo y disfrute que dicha actividad pueda traer consigo.

Representantes latinoamericanos: (de izq .- der.) Lorena de la Puente (NRGI Perú), Juan Diego Medina (Departamento Nacional de Planeación -DNP), Margarita Batlle (NRGI ), Yenny Rodríguez (Corte Constitucional -Colombia), Agustín Romero (Comisión Nacional de Hidrocarburos -México) y Andrés Vargas Ferro (Crudo Transparente -Colombia).

Mucho más queda por decir e implementar, pero por ahora, agradecemos al NRGI y a la CEU por su gentil invitación, por lo aprendido y por compartir con nosotros una experiencia única llena de talento alimentada por colegas del globo, conectando realidades únicas que sirven de ejemplo comparado para llamar urgentemente a la transparencia y la buena gobernanza del sector en Colombia y sus distintas realidades regionales que sufren un desgaste por los impactos del sector, bajo un escenario crítico de cara al desabastecimiento y una curva de aprendizaje importante que ha dejado grandes lecciones -de ahorro y gasto-, pero en un periodo de historia petrolera que podría estar llegando a su ocaso.

Columna de opinión regional

¿Más petróleo, menos agua?

Por: Maria Fernanda Cortázar

Diversas familias que habitan la vereda El Dique en el municipio de Yondó, Antioquia, han realizado denuncias por el vertimiento sobre el río Magdalena de aguas tratadas por una planta de petróleo, que ha llegado a contaminarlo afectando actividades del territorio como la pesca, el abastecimiento del recurso y generando problemas en la salud de los habitantes.

Estas provienen de la Refinería de Barranca, una de las infraestructuras petroleras más importantes del país operada por la estatal petrolera Ecopetrol. Frente al tema, la empresa ha dicho que efectivamente tienen dos puntos de vertimiento de aguas industriales; sin embargo, aclaran que estas son monitoreadas semestralmente para garantizar los parámetros de calidad exigidos por la Autoridad Ambiental Regional, Corantioquia.

A pesar de esto, se puede decir que estas medidas no son suficientes para evitar la contaminación del agua y causar efectos colaterales en la salud de la población, así se evidencia en las denuncias de la comunidad de Yondó, quienes aseguran que desde la instalación de los tubos los niños se han enfermado y las alergias han estado presentes.

Frente a este panorama surgen dos preguntas: ¿es posible hablar de la actividad petrolera sin contaminación, teniendo en cuenta que para este caso uno de los afectados es el principal afluente del país? Y ¿estamos en un momento en donde tenemos que elegir entre el agua o el petróleo? Acaso eso no es lo que el sector trata de evitar.

Para nadie es un secreto que, como todas las actividades, la producción de petróleo también tiene sus riesgos, por tanto, hablar de este tipo de trabajo sin tener algún peligro puede llegar a ser un error. Lo más importante ante estas situaciones es que las autoridades ambientales y empresas tomen las medidas necesarias para minimizar los impactos y evitar hechos como el que se presenta actualmente en Antioquia.

Cuando el bienestar de una comunidad y un ecosistema se encuentra en peligro, se debe tener en cuenta el principio de: evitar, mitigar y compensar, es decir, lo ideal es contar en primera instancia con medidas preventivas que deben ser rigurosas, más no con medidas correctivas, como está sucediendo. Para este caso puntual, tanto Ecopetrol como Corantioquia podrían aumentar la periodicidad con que se realizan los monitoreos, haciendo uno por mes, y en caso tal de que se presente un problema, se pueda tratar a tiempo.

Así mismo, estos puntos de vertimientos de aguas residuales deberían ser trasladados a lugares donde se tenga la certeza de que no va a contaminar las fuentes hídricas de donde se abastecen las comunidades. Adicional a esto, se debe hacer un llamado al gobierno departamental para que destine recursos suficientes que permitan garantizar a las comunidades el uso y consumo de agua potable.

Antes de tomar una decisión tan radical como dar por terminadas las actividades relacionadas con la industria petrolera, se hace necesario buscar un equilibrio entre producción y bienestar de las comunidades y del medio ambiente. Por eso se hace un llamado tanto a empresas, como a gobierno y autoridades ambientales, para que inviertan en tecnologías más avanzadas que ayuden a mitigar los impactos, a realizar de manera constante el respectivo control a este tipo de actividades, a ejecutar planes de contingencia efectivos en caso tal de que se presenten fallas, velando siempre por el cuidado humano y ambiental, especialmente en un recurso vital como el agua.

INDICADORES BRENT & WTI / SEMANA

Crudo Transparente por un sector minero-energético abierto, informado y responsable