Pulso Petrolero Regional. 31 enero de 2017

Enero estuvo marcado por la incertidumbre de las conversaciones de paz entre el gobierno del presidente Juan Manuel Santos y el grupo armado no estatal, Ejército de Liberación Nacional (ELN). El gobierno insistía en la previa liberación del excongresista Odín Sánchez, para dar inicio a los diálogos, pero el grupo armado fue bastante reticente a esta imposición. Solo a finales del mes se llegó a un acuerdo que dejaría en libertad al exparlamentario y se daría inicio a la fase pública de negociaciones. 

Mientras lo anterior sucedía, se llevaron a cabo acciones armadas en diferentes zonas del país, donde uno de los principales objetivos fue atacar la infraestructura petrolera en Norte de Santander y Arauca, zonas de fuerte presencia del ELN. Por su parte las fuerzas armadas, adelantaron diferentes operaciones para detener el accionar del ELN. Se destaca la incautación de combustible para la fabricación de estupefacientes, desmantelamiento de refinerías y válvulas ilegales. 

 Por otro lado, las comunidades se manifestaron en varias regiones petroleras en contra del sistema de contratación, la poca inversión del sector en sus territorios y el incumplimiento de acuerdos por parte de las operadoras y contratistas. Se destaca las movilizaciones de habitantes de los municipios de Arauca y Arauquita, departamento de Arauca, exigiendo la restitución de las tierras que les fueron despojadas por el gobierno al inicio del proyecto de exploración y explotación del Campo Caño Limón. 

A continuación, Crudo Transparente detalla los sucesos relacionados con la industria petrolera durante el mes de enero de 2017.  

MOVIMIENTOS SOCIALES 

  • Marchas 

A mediados del mes, habitantes del corregimiento El Centro de Barrancabermeja, marcharon para exigirle a Ecopetrol una mayor participación laboral en el proyecto La Cira Infanta, ya que los perfiles publicados son excesivos y no se adaptan a la realidad de la mano de obra local. Buscan que la petrolera deje de contratar personal foráneo e invierta más en la zona aledaña al campo. 

Por otro lado, finalizando enero, organizaciones ambientalistas marcharon en el municipio de Guamal, Meta, en defensa del agua y la vida, y en oposición a la construcción de un nuevo pozo en su territorio, por parte de la estatal petrolera, Ecopetrol, y la compañía española Repsol. 

  • Protesta

 En los primeros días, representantes de una compañía que presta servicios de certificación de alturas, se manifestaron a las afueras de las instalaciones del campo Jacana, operado por Geopark, porque la operadora no estaba validando las certificaciones. La empresa petrolera argumentó que no contaban con los requisitos exigidos por la ley colombiana y que la seguridad de sus trabajadores era primordial. 

En la vereda Rubiales, Puerto Gaitán, Meta, las habitantes de la zona protestaron a Ecopetrol por compromisos incumplidos por parte de la compañía y por los daños ambientales causados por la contaminación con cinco mil barriles de crudo y aguas asociadas a la producción que fueron arrojados a las aguas del Caño Ivot, en diciembre, y que terminaron afectando a comunidades indígenas de la región. 

Los últimos días del mes, la comunidad del área rural de Yondó, Antioquia, protestaron contra dos compañías contratistas de Ecopetrol que operan en el campo Casabe. De acuerdo a información de la Unión Sindical Obrera de la Industria Petrolera (USO), la manifestación iba dirigida principalmente a la empresa Weatherford por el incumplimiento en la contratación de mano de obra local. Ecopetrol se manifestó frente al hecho y aseveró que durante la actividad, personas ajenas a las operaciones irrumpieron en el campo y paralizaron equipos; ocasionando conato de incendio en varios pozos y el normal funcionamiento del complejo.  

  • Plantón

En la Estación petrolera Chichimene en Acacias, Meta, a mediados de enero, trabajadores de Tradeco, contratista de Ecopetrol, decidieron realizar un plantón para exigir el pago de sus sueldos atrasados. Según la USO, se les adeudaba 8 meses de salarios y estaban sin seguridad social. 

  • Bloqueo de vías 

Finalizando enero, trabajadores de la planta de etanol El Alcaraván, de propiedad de Bioenergy, bloquearon el acceso al complejo localizado en Puerto López, Meta. Los manifestantes pedían mayor contratación local. De acuerdo a comunicado de la empresa, el hecho paralizó parte de las actividades, dejando pérdidas por 800 millones de pesos mensuales e impidiendo nueva contratación y la compra de bienes y servicios a la comunidad. 

  • Uso excesivo de la fuerza pública 

A mediados de mes, habitantes de las veredas Corralito, La Osa, Líbano y Vivero, municipio de Arauquita, protestaron por los desalojos que estaba realizando la Policía en sus terrenos, ubicados dentro del complejo petrolero Caño Limón. Durante la manifestación, la fuerza pública intervino, dejando dos personas heridas. También, se destruyeron semillas, se bloqueó la salida de productos agrícolas y la libre locomoción de los campesinos.

La comunidad viene adelantando un proceso de restitución de tierras, localizadas dentro del campo, ya que argumentan que cuando comenzaron las operaciones de producción, fueron desalojados con la promesa de ser reubicados en un plazo no mayor a un mes; pero ya han pasado más de 20 años y no se les ha cumplido.

Por su parte, Occidental de Colombia, empresa que opera el complejo, afirmó que presentaría un informe donde detallarán las zonas de riesgo y buscarán acuerdos con los lugareños para trasladar las viviendas y cultivos.  

 MEDIO AMBIENTE

  • Fuga de crudo

A finales del mes, se presentó fuga de hidrocarburos por el poliducto Pozos Colorados Galán, a la altura del corregimiento de Besote – La Gloria, departamento del Cesar. De acuerdo a medios de comunicación local, el hecho se presentó por el mal estado de la infraestructura, que está a cargo de la empresa Termotécnica Coindustrial S.A, contratista de Ecopetrol. El suceso contaminó las aguas de la quebrada Besote y también generó un incendio en el mismo cuerpo de agua; dejando un lesionado con heridas leves y cientos de peces muertos. 

Por otro lado, en el sur de Bolivar, un remolque que transitaba por el río Magdalena a pocos kilómetros de Puerto Wilches, Santander, rompió un tubo inactivo de Ecopetrol que pasa por debajo del caudal del río. Se presentó el vertimiento de cerca de 20 galones de petróleo; personal de la estatal petrolera debió atender la emergencia. 

ORDEN PÚBLICO E ILEGALIDAD

  • Hostigamiento o ataque a la infraestructura petrolera

Ecopetrol denunció finalizando enero, 7 ataques contra el oleoducto Caño Limón – Coveñas. Las acciones se realizaron en zonas rurales de los municipios de Teorama, Norte de Santander y Arauquita, Arauca. Se desconocen los actores de los hechos, pero en esta región ejerce presencia el ELN y este móvil ha sido recurrente por este grupo armado. 

  • Instalación de válvulas clandestinas

Durante el primer mes del año, tropas del Ejército Nacional lograron identificar y retirar ocho válvulas instaladas de manera ilegal en el oleoducto Caño Limón – Coveñas. Estos artefactos fueron encontrados en zona rural de los municipios de Tibú y Teorama, Norte de Santander.   

  • Refinerías ilegales

Durante los últimos días de enero, integrantes del Ejército Nacional, desarticularon cinco refinerías ilegales, localizadas en zona selvática de Teorama y Tibú Norte de Santander, y una en Puerto Caicedo, Putumayo. En los operativos, se incautaron más de 13 mil galones crudo, canecas de almacenamiento, cientos de metros de mangueras, y demás insumos. Estas estructuras ilegales pertenecían al ELN y la banda denominada “La Contru”. 

  • Contrabando de crudo y derivados 

En esta materia, la fuerza pública incautó los primeros días de 2017, 3.963 galones de gasolina venezolana. Los hechos se registraron en operativos en zonas rurales de Cúcuta y Sardinata, en Norte de Santander. 

También durante los primeros 10 días de enero, tropas del Ejército decomisaron 1.300 galones de combustible de contrabando, en el sector El Pájaro, municipio de Riohacha, La Guajira. En hechos similares, en el departamento de Chocó se incautaron 10.580 galones de ACPM y 36 de gasolina. 

Por otro lado, la División de Aviación Asalto Aéreo, localizaron con sistemas no tripulados, 15 camiones que transitaban por el área rural de El Tarra, Norte de Santander. Los vehículos iban cargados con aproximadamente 45 mil galones de hidrocarburos. 

Para finalizar, tropas del Ejército, en coordinación con la Policía Metropolitana de Cúcuta, decomisaron 3.500 galones de gasolina procedente de Venezuela. El operativo se llevó a cabo en el sector Pedregales, municipio de Zulia, Norte de Santander. 

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