Mejorar las condiciones de los trabajadores petroleros es una prioridad
Petróleo crudo Foto blogspot.com
Cuando las empresas petroleras llegan a las regiones, traen oportunidades laborales y salarios atractivos, directamente en los campos de explotación o indirectamente a través de la economía de bienes y servicios. En el contexto actual, la crisis de los precios del petróleo ha tenido severas consecuencias como despidos, desempleo y quiebra de empresas contratistas, lo que ha agudizado las tensiones laborales.
Por ejemplo en el Huila, la situación se volvió muy tensa desde el año pasado cuando se ha empezado a despedir o a no renovar contratos de los trabajadores de la industria. Pero no es el único motivo de descontento. En mayo de este año, un grupo de personas que sufrió de accidentes laborales o desarrolló alguna enfermedad tras su labor en la industria petrolera protestó durante días frente al Palacio de Justicia en Neiva para que se reconociera su condición.
La mayoría fue despedida sin reconocimiento ni ayuda. Su actual enfermedad o discapacidad les impide encontrar trabajo de nuevo. Doce personas se encadenaron al palacio y cuatro hasta se cosieron la boca como medida para que las autoridades les escuchen y atiendan. Además, la Unión Sindical Obrera (USO) llamó la atención este mes sobre la entrega de cuatro campos maduros por parte de Ecopetrol a empresas contratistas. Según la USO, este cambio va a fragilizar las condiciones de los trabajadores, ya que “no tienen pacto colectivo o un acuerdo convencional con los trabajadores”.
Mediante visitas a los departamentos del Meta, Norte de Santander, Casanare y Putumayo, Crudo Transparente habló del tema laboral con miembros de las comunidades, empresas, autoridades y sindicato y pudo constatar que unos de los puntos de controversia más importantes giran en torno a la contratación y el empleo de la mano de obra local.
Por ejemplo, a pesar de que el decreto 2089 obliga a las empresas petroleras a contratar 100% de la mano de obra no calificada local y 30% de la mano de obra calificada local, las comunidades denuncian a menudo que las compañías no respetan esa obligación y traen personal de otros municipios o personal extranjero para cumplir con las labores del sector. Lo grave es que la vigencia de dicho decreto termina el próximo 17 de octubre, sin que el gobierno haya previsto o socializado nada con las comunidades y empresas para reemplazarlo o darle continuidad.
Este mes, Crudo Transparente analizó la situación de la contratación en el sector petrolero y publicó la investigación: Problemática de la contratación en regiones petroleras”. La contratación muchas veces asumida por las juntas de acción comunal (JAC) y las asociaciones de juntas de acción comunal (Asojuntas), como resultado de un compromiso entre comunidades, autoridades locales y empresas. Sin embargo, resulta que ese sistema ha sufrido desviaciones: algunos líderes aprovecharon esa oportunidad para generar un negocio propio y hasta en algunas partes se infiltraron o influyeron bandas criminales.
Para regular la actividad de intermediación, la ley 1636 de 2013 previó la implementación del Servicio Público de Empleo (SPE), operado por la Agencia Pública de Empleo mediante la creación de centros de empleo. A pesar de esto, la realidad en el terreno es distinta: las JAC y Asojuntas en muchas partes siguen teniendo un papel importante en la contratación, algunas por interés económico y la mayoría por desconocimiento de la ley.
Tanto el fin del decreto 2089 como la implementación del SPE generan malestar y frustración dentro de las comunidades, pues se preguntan: ¿con esos cambios, cómo asegurar que se emplee mano de obra local?
Desde Crudo Transparente, llamamos a que:
- Las empresas garanticen condiciones de trabajo dignas, empleo de la mano de obra local, respecto hacia los sindicatos y que sean partes activas en la implementación del Servicio Público de Empleo (SPE).
- Las comunidades apoyen la implementación del SPE para que la contratación respete criterios objetivos.
- Las autoridades nacionales debaten, socialicen y apoyen la implementación de las medidas, de la mano con las empresas y las comunidades, ya que la desconfianza y el desconocimiento en las regiones petroleras están generando más tensiones en un contexto de disminución de la actividad petrolera.
investigacion@crudotransparente.com
CTColombia
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