SEMANA DEL 6 AL 12 DE JUNIO DE 2015

Atentados a la infraestructura petrolera no dan respiro en Colombia

Esta semana, los medios reportaron la escalada de ataques por parte de la guerrilla de las Farc en todo el país. Al derribamiento de torres de energía y la detonación de artefactos contra la fuerza pública, se suman los ataques a oleoductos, pozos y servicios de transporte de hidrocarburos, cuyos daños aún se están calculando.

El pasado domingo 7 de junio, se registraron dos acciones violentas en zona rural del municipio de Tibú, Norte de Santander.  Las autoridades informaron que guerrilleros del frente 33 de las FARC activaron explosivos contra la maquinaria de Ecopetrol en las veredas La 30 y La Carbonera, restando a la producción unos 50.000 barriles. 

Los ataques continuaron el lunes, esta vez en la vereda La Cabaña, corredor Puerto Vega – Teteyé, Putumayo. Allí, las Farc obligaron a los conductores de 23 camiones cisterna a abrir las válvulas y provocar un derrame de crudo. Según las cifras de Vetra, empresa encargada de operar el campo del que se extrajo el crudo derramado, se derramaron 3.120 barriles  de crudo, cuyo valor asciende a 171.600 dólares, unos 451,3 millones de pesos. El presidente de la petrolera, Humberto Calderón Berti, anunció que de continuar así, la compañía suspendería  las operaciones en Putumayo, advirtiendo que dicha decisión no solo afectará las utilidades de la compañía, sino las proyecciones de producción de petróleo de Colombia. 

Respecto a los daños ambientales, el Ministro de Ambiente  y Desarrollo Sostenible, Gabriel Vallejo, explicó que el derrame afectó nueve humedales en total: siete en la vereda La Cabaña y dos más en la vereda de Santa Rosa, lo que suma 3,5 hectáreas de humedales contaminados, que implican un grave deterioro al ecosistema de fauna y flora en la región, cuya completa recuperación podría tomar años.

Además, se afectaron tres tanques piscícolas y los nacimientos de agua que abastecen a las familias de estas comunidades. En total resultaron afectadas 70 familias de la vereda La Cabaña, 100 familias más del Cabildo Alto Lorenzo de la comunidad Nassa, estudiantes de la región y habitantes de la vereda Santa Rosa, entre otros habitantes de la zona, según informa un reporte de la Corporación para el Desarrollo Sostenible del sur de la Amazonía (Corpoamazonía).

En la jornada del martes, un nuevo ataque se presentó a la altura de la vereda El Carmen, municipio de Córdoba, en Tumaco (Nariño) por cuenta de la voladura del Oleoducto Trasandino, que generó un derrame de crudo en el río Caunapí.  La situación pudo ser más grave, teniendo en cuenta que al momento del ataque el oleoducto no estaba operando, pero tenía una carga de entre 3.000 y 4.000 barriles de crudo que cayeron al afluente hídrico.

A pesar de la implementación del plan de contingencia por parte de Ecopetrol, un día después de registrarse los hechos, las autoridades ambientales declararon la alerta máxima por mancha de petróleo de 20 kilómetros que podría llegar a la bahía de Tumaco. Ecopetrol señaló que se han afectado unas 4.000 personas e hizo un llamado a las comunidades para que se abstengan de consumir o utilizar el agua del río Sucio hasta que se descarte la presencia de hidrocarburos. Los hechos agravan la situación de las comunidades rurales de Tumaco, quienes ya veían afectadas sus labores agrícolas y de pesca debido a la contaminación del río del que toman agua, como consecuencia de un atentado anterior.

A este ataque, se sumaron otros contra el transporte de hidrocarburos,  en Putumayo. En la mañana del jueves, guerrilleros del frente 48 atacaron una caravana de ocho camiones que transportaban crudo en la vía que de Puerto Asís conduce a la vereda La Alea. Según fuentes militares, los guerrilleros, armados y vestidos de civiles, obligaron a derramar el crudo de tres de estos vehículos.

Pero este no sería el último atentado de ese tipo. Ese mismo jueves, el general Juan Pablo Rodríguez, Comandante General de las Fuerzas Militares, confirmó que soldados del Batallón de Ingenieros número 27 de la Sexta División del Ejército evitaron un nuevo derrame cerca de la quebrada Aguas Negras, que desemboca en el río Mansoyá, en Puerto Asís. Gracias a la reacción de las tropas, el ataque del frente 48 de las Farc fue frustrado. Sin embargo, se alcanzaron a derramar 30.326 galones de crudo de los cerca de 60 mil que pueden transportar los cinco camiones.

Las acciones armadas en cifras según Ecopetrol

Por medio de un comunicado de prensa, Ecopetrol reveló que en estas últimas dos semanas se han presentado 16 de los 20 atentados y acciones terroristas registrados en 2015 contra oleoductos, pozos, líneas de trasferencia y equipos para la producción, mantenimiento y el transporte de crudo. Las acciones se han concentrado en el sur del país (Putumayo y Nariño), así́ como en varios pozos de los campos de producción de esa zona del territorio nacional.

Ecopetrol rechazó las acciones contra la infraestructura petrolera que se han registrado desde el 27 de mayo. Afirma la petrolera que en las últimas dos semanas se han presentado 16 de los 20 atentados y acciones terroristas registrados en 2015 contra  la industria petrolera. En lo corrido del presente año, se han derramado más de 14 mil barriles por cuenta de los atentados, afectando a 84 mil personas en las regiones donde se han presentado los ataques.

Por otra parte, Juan Carlos Echeverry, presidente de Ecopetrol, se solidarizó con las familias de los 32 miembros de la Fuerza Pública que han sido asesinados y con los 102 heridos en tareas de protección de la infraestructura energética en el 2015, y afirmó que se trata de un incalculable costo humano.

A pesar de la mala situación que vive la industria por cuenta de las acciones armadas, la petrolera Ecopetrol se mantiene en la meta de producir 760.000 barriles de crudo por día. Según afirmó su presidente, “vamos a hacer todo lo posible para que esas metas se mantengan”.

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María Camila Pinilla

investigacion@crudotransparente.com