Por: Elizabeth Perea Rodríguez
La exploración y explotación industrial de hidrocarburos en el Huila lleva más de cincuenta años, donde la historiografía demuestra que la actividad petrolera en la región es relativamente escasa y ha dejado huellas de las nacientes normas y aplicación de estas sobre el sector. De ahí la importancia que cobra este trabajo, pues no sólo pretende dar a conocer datos, actos administrativos, sino interpretar desde un análisis de los aspectos socio-económicos, políticos y ambientales la importancia de los tres entes ( gobierno, empresa y comunidad) en el desarrollo de la actividad petrolera.
En el departamento del Huila se han presentado conflictos entorno a los proyectos de hidrocarburos donde comunidades y organizaciones han expuesto públicamente su posición acerca de la incompatibilidad de este tipo de proyectos con la conservación de los ecosistemas y biodiversidad de la región. Un ejemplo clave de ello fue la multitudinaria marcha en la ciudad de Neiva en abril del 2014 donde tanto las autoridades municipales como las departamentales rechazaron la posibilidad de realizar actividades exploratorias y de explotación en las inmediaciones del río las Ceibas. Donde el Concejo Municipal aprobó un proyecto de acuerdo que prohibió el desarrollo de estas estas actividades pues se consideró que afectan de forma directa el río las Ceibas.
Ante todo, es importante reconocer que la cuenca hidrográfica del río las Ceibas es la principal fuente de abastecimiento hídrico para la capital del departamento del Huila. “Se encuentra localizada en el costado oriental de la ciudad de Neiva, sobre la vertiente occidental de la cordillera oriental, delimitada por accidentes geográficos muy definidos, que van desde las altas montañas y dividen al municipio con el departamento del Caquetá, hasta la desembocadura en las aguas del río Magdalena; tiene un área aproximada de 29.968,14 Ha, representando el 18.3 % del municipio de Neiva y a su vez cuenta con una reserva forestal protectora delimitada en 15.500 hectáreas, de las cuales actualmente se llega a 7.171 hectáreas compradas. Esta zona forma parte de la Reserva Nacional Siberia Ceibas declarada mediante la Ley 2 de 1959” [1]
Dicha cuenca se divide en zona alta conformada principalmente por la quebrada la Plata con 1.090.4 Ha., quebrada Motilón con 3.756.6 Ha., quebrada San Bartolo con un área de 5.336 Ha.; en la margen derecha por los nacimientos del río Las Ceibas con 2.325.6 Ha. con una red de drenaje tipo dendrítica. La zona media alta que se caracterizan por un corto recorrido variable entre 2.1 y 3.5 Km. drenan independiente y directamente a Las Ceibas, constituyendo 4.629. Has. de captación, los principales cauces son: La Gervacia, El Cedral, Yarumal, Santa Helena, Canoas, El siervo y La Sierra y la zona baja, la cual está conformada en su gran mayoría por drenajes fugaces que llevan agua cuando llueve e inmediatamente después, entre los principales cauces se destacan las quebradas Los Micos, Guayabal, El Rodeo y La Cruz [2].
Vale la pena mencionar las principales normas que enmarcan la ordenación y manejo de las cuenca hidrográfica: a) Decreto Ley No. 2811 de 1974 que define la delimitación y el concepto de ordenación, así como los casos en los cuales éste se deberá aplicar b) Ley 99 de 1993 establecen funciones y competencias tanto para la CAM como para los entes territoriales en relación con la ordenación, con la administración y manejo de los recursos naturales renovables c) Acuerdo del Consejo Directivo CAM No. 006 de 2007 por el cual se adoptó el Plan de Ordenación y Manejo de la misma. Normas que regían mucho antes del intento de exploración y explotación de hidrocarburos en la cuenca del río las Ceibas y que se identifican como áreas protegidas en el mapa de localización POMCH Ceibas sobre áreas ANH proporcionado por la Agencia Nacional de Hidrocarburos a Crudo Transparente.
Ahora bien, el Plan de Ordenación y Manejo de la Cuenca Hidrográfica del Río las Ceibas (POMCH), expone que la calidad y cantidad de este caudal se han visto afectados por del desarrollo comercial y poblacional de la ciudad. Entre las problemáticas más notorias se encuentran: contaminación hídrica, deforestación, reducción de la productividad del suelo (erosión), desprotección de laderas, alteración del régimen de caudales, avalanchas e inundaciones, fragmentación de ecosistemas estratégicos, reducción de la biodiversidad y destrucción de hábitat, fragmentación de los bosques de la parte alta que constituyen el corredor biológico de norte a sur del departamento, ineficiencia gubernamental, entre otros. [3]
Pese a lo anterior, la Agencia Nacional de Hidrocarburos por medio de la ronda Colombiana 2010 ofertó el Bloque VSM-13 mediante contrato 41 del 16 de marzo de 2011 “Contrato de exploración y explotación de hidrocarburos entre Alange Energy y la Agencia Nacional de Hidrocarburos, ANH” el cual colindaba con el Campo Río Ceibas de Ecopetrol. Este permitía la exploración y explotación en la cuenca media y alta del río las Ceibas, donde se encuentra la Reserva Forestal Nacional Siberia. Situación que causó conmoción en la población opita pues se consideró en el POMCH que la zona media y alta de la cuenca no cuenta con las características geológicas y socioeconómicas necesarias para el desarrollo de esta actividad.
¡LAS CEIBAS NO SE EXPLOTA!
El exconcejal Hernán Motta Escobar contó para Crudo Transparente cómo se generó el proceso de oposición ante el intento de explotación de hidrocarburos en la zona media y alta de la cuenca,
“En el año 2013 cuando conocí de primera mano la información que una multinacional llamada Alange Energy venía a realizar la socialización del polígono VSM-13 de 58400 hectáreas que el gobierno nacional le otorgó a esta multinacional, nos dimos a la tarea de conocer que se pretendía desarrollar allí, ciertamente este polígono le permitía la exploración explotación de hidrocarburos en la cuenca media y alta del río las Ceibas. Esto nos alertó y decidimos convocar al concejo de cuenca del río la Ceibas con los cuales se realizó un documento de intención que se le envió al Gobierno Nacional diciéndole cuales eran las razones por las cuales era inviable realizar estas actividades en la cuenca. Ciertamente el gobierno nos respondió con evasivas. Manifestando que se tendría en cuenta el documento y se realizaría explotación de hidrocarburos de manera sostenible respetando el bosque seco”.
Por esta razón y como respuesta a la intención del gobierno central de realizar exploración y explotación en la cuenca, el exconcejal Hernán Motta Escobar decidió organizar un equipo de trabajo por la defensa del río de las Ceibas, denominado hoy “Fundación Comité Cívico Río las Ceibas – FUNCEIBAS” con el objetivo de “promover la biodiversidad a través de la defensa, protección, conservación y restauración de espacios, en cuyos escenarios, se encuentran los recursos naturales renovables y no renovables, sus interrelaciones, los procesos sociales y culturales de tal manera que se garanticen los derechos humanos de las comunidades afectada o potencialmente afectadas por políticas gubernamentales acciones de particulares que ponen en peligro el equilibrio y la resiliencia de los ecosistemas y coadyuven a garantizar su sostenibilidad”.
Los directivos de FUNCEIBAS aseguraron durante la entrevista realizada por Crudo Transparente que la formación geológica relativamente temprana de la cuenca la hacen altamente inestable y susceptible a deslizamientos. Precisamente por eso, desde finales de la década de los ochenta, la municipalidad, el Consejo de cuenca y entidades como la FAO, la CAM y los gobiernos departamentales y nacionales han realizado inversiones con el fin de contrarrestar el deterioro de la cuenca y recuperarla.
Conviene destacar que el Comité partiendo de la base social campesina, convocó a la comunidad opita para formar el más “grande haz de voluntades” con el ánimo de defender el río las Ceibas, el día 10 de abril del 2014 donde cerca de 45 mil ciudadanos aclamaron ¡Las Ceibas no se explota! Según el alcalde de turno Pedro Hernán Suárez la marcha tuvo como propósito sensibilizar sobre la importancia de la cuenca, pues esta sólo es centro de atención cuando presenta afectaciones medioambientales y a su vez elevar un mensaje de protección.
Al mismo tiempo, Germán Rodríguez, el exsecretario de Medio Ambiente de Neiva, corroboró la intención del Alcalde de turno de no permitir la exploración y explotación de hidrocarburos, invocando la Carta Magna y el artículo 63 de la Ley 99 de 1993 que permite a las entidades territoriales emitir un concepto como autoridad ambiental, cuando alguno de sus recursos se vean amenazados o vulnerados. Por consiguiente, solicitó a la ANH que respetara el Plan de Ordenación y Manejo de la Cuenca hidrográfica del Río las Ceibas, donde se establece la recuperación de la parte alta de la mismo.[4]
Apoyando lo dicho por el exsecretario, el señor Hernán Motta Escobar considera que la zona media y alta de la cuenca requiere un tratamiento de reparación en todos los sentidos, pues se enfrenta una comunidad vulnerable y un hábitat golpeado por el desarrollo de la sociedad.
“De acuerdo al POMCH y algunos otros conceptos importante de geológicos como el ingeniero Oscar Vanegas se determinaron 2 aspectos importantes por los cuales no era conveniente la explotación de hidrocarburos en la cuenca alta y media, en primer lugar por ser el único recurso hídrico con el que cuenta el municipio y en segundo lugar por ser una cuenca joven de formación volcánica que los geólogos han determinado inestable aún por sus misma formación, lo que podría genera una catástrofe, avalancha, deforestación lo que podría determinar una emergencia gravísima superior o igual a como la que ocurrió el Armero-Tolima”
Particularmente, la Unión Sindical Obrera de la Industria del Petróleo (USO), se solidarizó con la lucha de la población opita y participó de la denuncia en contra de la explotación petrolera en la cuenca. Consideran que durante la historia en el departamento del Huila, la industria petrolera sólo ha dejado pasivos sociales, ambientales y humanos que desmejoran cada vez más la calidad de vida. Específicamente la extracción de crudo que pretendía realizar la empresa canadiense Alange Energy Corp. derrumbaría todo el trabajo de recuperación de ese escenario natural llevado a cabo por la FAO, la Corporación Autónoma Regional y la Alcaldía.
El representante legal de FUNCEIBAS Víctor Hugo Peralta durante la entrevista realizada por Crudo Transparente manifestó que el impacto ambiental era el pionero de la lucha en contra de la explotación de hidrocarburos en la cuenca sin embargo existían otros factor de igual o menor magnitud.
“El temor por la realización de exploración y explotación de hidrocarburos en la cuenca media y alta se debe no sólo al impacto ambiental sino el desarraigo de la población social en ese sector, pues como es bien sabido dónde pretendía llegar la industria petrolera hay problemas de prostitución, despojo de tierras, drogadicción, entre otros. Así como una disminución de la posibilidad de laboral en estas actividades, pues por lo general estas compañías traen consigo personal cualificado de otras regiones disminuyendo la intervención de la comunidad. Sin embargo el principal temor eran los problemas de deslizamiento, amenaza, vulnerabilidad y riesgo que se podrían presentar en la zona de influencia”.
Del mismo modo, Ariel Borbón exdirector de la CAM aseguró que “El desarrollo de la actividad sísmica pondría en riesgo el proyecto de conservación de la cuenca que lleva casi seis años en ejecución y ocho años en el proceso de formulación. Desde el punto de vista técnico, nuestros funcionarios hicieron una evaluación del área y establecieron que es muy rica en humedales, con ecosistemas estratégicos como la microcuenca de ‘La Mochilera’ y la serranía de ‘La Buitrera’, en donde hay una gran cantidad de nacimientos y de humedales”. De igual manera, enfatiza en la pérdida de un área rica en especies de aves donde varias se encuentran en peligro de extinción a su vez de zonas donde se realiza actividad agrícola sostenible.[5]
SITUACIÓN ACTUAL DEL CORREGIMIENTO RÍO LAS CEIBAS
En primera instancia, el corregimiento del río las Ceibas ubicado al este del municipio de Neiva, limita al norte con el corregimiento de Fortalecillas y el corregimiento de Vegalarga, al este con el departamento de Caquetá, al sur con el corregimiento del Caguán y al oeste con las comunas 10, 8, 7 y 6 del área urbana. Fue constituido inicialmente como Ceibas Adentro y Ceibas Afuera haciendo referencia el primero de ellos a la parte alta del corregimiento con sede en la Vereda el Motilón y la segunda a la parte baja o plana del mismo que se ubica cerca de la zona urbana de la ciudad de Neiva, con sede en la vereda Platanillal; tuvo sus inicio entre los años 1880 y 1890 [6].
Habitado inicialmente por la tribu indígena “Los Tama”, pero poblado en su mayoría por personas desplazadas a causa del conflicto armado que azota a Colombia. En 1901 se generó el primer desplazamiento forzoso generado por la “Guerra de los mil días” y de los enfrentamientos bipartidistas por los que atravesaba el país. Durante 1920 y 1930 la población se volcó al progreso construyendo carreteras mediante pica y pala, así como el acueducto e instituciones educativas. Destacándose por el desarrollo de actividades agrícolas como la cultivación de frijoles, arveja, yuca, plátano entre otros; y la ganadería. Sin embargo, la producción de estos cultivos disminuyó con la intención de conservar la Cuenca hidrográfica del río las Ceibas.
A partir de lo definido en el plano “División Político Administrativa” el corregimiento está dividido en ocho (8) veredas: Platanillal, Motilón que cuenta con el sector de Alto Motilón, La Plata con el sector Turquila, Pueblo nuevo con el sector de las Nubes, San Miguel con los sectores Canoas y Primavera, Santa Elena con los sectores El Vergel, los Cauchos y Floragaita, Ceibas Afuera con los sectores el Centro y Santa Bárbara y Palestina con el sector los Alpes [7].
En segunda instancia, al analizar las características socioeconómicas del corregimiento se encontró que el total de la población rural de la Cuenca del Río las Ceibas es de 2.288 habitantes y posee un área total 289.025 km2. A su vez, las tres (3) veredas con mayor número de habitantes son: San Bartolo con 257 habitantes, un área total de 46.54 y; Vereda Canoas con 168 habitantes, un área total de 4.949 y Santa Lucía con 164 habitantes, un área total de 19.143 857 km2. Donde el total de viviendas rurales es de 720, de las cuales 591 están habitadas y 129 deshabitadas [8].
Existen 142 predios sin vivienda, “por lo que se deduce que éstos son empleados como sitios de trabajo o lotes que aunque alejados de las viviendas complementan los sistemas productivos, base de la economía de cada familia; entre estos tenemos las veredas Ceibas Afuera, Floragaita, Caucho y Centro, y en unos pocos casos corresponden a lotes o áreas de bosque destinadas a la conservación” [9]
Por su parte, la población de la cuenca está distribuida de la siguiente manera, “el 15.29 % de la población (350 niños) están entre 0-4 años, el 15.38% (352 personas) están entre 5-9 años; el 13.11% (300 personas) tiene una edad entre 10 -14 años; el 47.37% (1.084 personas), están en la edad productiva que es de los 15 a 59 años y solo un 8.82% (202 personas) son adultos mayores”. En esta misma línea, la distribución de la población de la cuenca presenta un número mayor de población en género masculino abarcado por 56% del total; es decir, 1281 personas, y las mujeres presentan un porcentaje menor, 44%, lo que corresponde a 1.007 personas [10].
La presidenta de la Junta de Acción Comunal de las Ceibas Centro, Claudia Patricia Jaramillo, afirmó durante la entrevista realizada por Crudo Transparente que:
“El corregimiento río Ceibas aunque presenta una distribución casi equitativa de género posee problemas para articular a la mujer en los procesos de toma de decisiones, aunque somos varias las presidentas de Junta de Acción Comunal muchos pasan por alto nuestras iniciativas y obstaculizan en cierta medida el desarrollo de nuestras actividades en pro de la comunidad, lo que nos frustra pues tenemos las misma capacidades y merecemos el mismo trato”.
Al analizar la cobertura de los servicios públicos y saneamiento básico, se encontró que el servicio de acueducto del Corregimiento Río las Ceibas, según Aguas del Huila, sólo abarca cuatro (4) veredas: Motilón, con una cobertura de 33.33%; Palestina, con 6.33%; Pueblonuevo, con 92%; y San Miguel, con 50%. A su vez expone que en la zona rural sólo el 69.12% cuenta con alcantarillado.
La señora Claudia a su vez expuso durante la entrevista: “Las viviendas sin este servicio han diseñado un sistema de mangueras plásticas de media pulgada para la conducción del agua sin ningún tipo de control sobre el suministro. De manera similar, el servicio de energía eléctrica sólo lo disfruta el 64% de la población y el restante crea alternativas de luminosidad”.
En lo relacionado a la Prestación de los Servicios de Salud, existen 2 puestos de salud, que atiende las 22 veredas pertenecientes a la Cuenca, están ubicados en la Veredas Santa Elena y, Motilón, son promotoras de tiempo completo con programas de promoción y prevención.
Análogamente la Secretaría de Salud Municipal afirma que la población afiliada al sistema de seguridad social por régimen se distribuye de la siguiente manera: 845 personas se encuentran en el SISBEN, con una cobertura del 85.1%; 447 personas son del régimen subsidiado con 48.1%; 282 personas pertenecen al régimen contributivo con del 28.4% y 233 personas no están afiliadas al SGSSS nivel 1 y 2 con de 23.5%. Dentro de estas El 68.45% de la población manifiesta haber sufrido de Infecciones Respiratorias Agudas (IRA), el 10.92% manifiestan haber sufrido enfermedades gastrointestinales debido a las condiciones precarias en las que viven.
En materia educativa, “las veredas San Bartolo, Chapuro, Tuquila, Las Nubes, Pueblo Nuevo, Motilón, Alto Motilón y la Plata tienen 31 niños que están en edad escolar y que no están estudiando. Existen 60 personas adultas entre hombres y mujeres que son analfabetas y 570 niños, que podrían ser estudiantes potenciales para el Colegio de Secundaria. En las veredas Palestina, Santa Lucía, Canoas, San Miguel y primavera, de la población escolar solo el 49% estudian actualmente y el 51% no están estudiando. [11]
Existen 84 personas adultas entre hombres y mujeres que son analfabetas y 197 niños, que podrían ser estudiantes potenciales para el Colegio de Secundaria. En las veredas Ceibas Afuera, Floragaita, Platanillal, Santa Elena, Santa Bárbara, Vergel, Cauchos, El Centro y Venadito existen 224 personas adultas entre hombres y mujeres que son analfabetas y 232 niños, que podrían ser estudiantes potenciales para el Colegio de Secundaria, el cual debe ser ubicado en un lugar equidistante para las demás veredas”. En consecuencia, el 41.61% de la población desarrolla producción agrícola, el 21.11% a la actividad agropecuaria y el 16.52% a la pesca [12].
La presidenta de la Junta de Acción Comunal de la vereda Ceibas Centro, Flor Nelly Ortiz aseguró durante la entrevista desarrollada por Crudo Transparente que, “La mayoría de la población de mi vereda accede como máximo recurso a la educación técnica en el SENA. Los niños de la vereda reciben clase sin agua potable y gas para la prestación del servicio de restaurante escolar. Adquieren agua de un pozo en pésimas condiciones lo que genera afectaciones en la salud”.
CONFRONTACIÓN MEDIO AMBIENTE-PETRÓLEO
El Coordinador del Proyecto Cuenca Río Las Ceibas de la CAM, Javier Cardoso Gutiérrez, manifestó durante la entrevista realizada por Crudo Transparente que el bloque VMS-13 poseía un área de 58.694,04 hectáreas y un área dentro de la cuenca de 16.953,24 hectáreas lo que representa un 28.84% del total de la cuenca. A su vez expuso que:
“Durante la revisión de aspectos ambientales del bloque VSM-13 determinamos que los corregimientos afectados directamente eran el río la Ceibas, Vegalarga y el Caguan. Para el caso del corregimiento río las Ceibas se afectaba la vereda Platanillo, Ceibas Afuera, Sector Floragaita, Sector el Vergel y el Sector los Cauchos. En el corregimiento Vegalarga se afectaba la vereda Santa Lucía y en el corregimiento del Caguan se afectaba la vereda Chapurro y el Sector Normandía”
Estos se ubican en la zona media y alta de la cuenca y al analizar la zonificación ambiental en el POMCH del río las Ceibas, desarrollada por la CAM, se identifica que la zona alta de la cuenca es una zona de producción agroforestal sostenible de clima seco, relieve ondulado y quebrado. Se localiza en los sectores de La Siberia y Santa Rosalía al extremo suroriental y noroccidental de la cuenca respectivamente, donde se conservan áreas boscosas de tipo protector (bosque nativo y bosque secundario).
En estas superficies están incluidas las áreas boscosas de los predios comprados por el municipio desde el año 1994 en aplicación del artículo 111 de la Ley 99 de 1993; los cuales suman 2.895,6 Has de un total 3.635,95 Has adquiridas para incorporarlas a la reserva forestal protectora declarada por el INDERENA. En ella se presenta un conflicto medio-alto por el uso del suelo principalmente por el manejo inadecuado de los recursos para la producción agropecuaria. A su vez, por la condición del suelo y la concentración de las lluvias se presentan erosiones e infiltraciones del agua lo que incrementa la velocidad de arrastre. [13]
El bosque Siberia presenta una gran fragmentación que implica una recuperación por medio de acuerdos con la comunidad para el desarrollo de actividades que reactiven la reactivar la condición de conectividad entre La Siberia y Santa Rosalía como eje central para la conservación en la cuenca.
Asimismo, la zona media de la cuenca presenta erosión crítica lo que constituye amenazas naturales, a su vez se evidencian restricciones de uso, localización de asentamientos, infraestructura de servicios y actividades agropecuarias que implican el uso intensivo de los recursos naturales. Especialmente veredas como el Vergel y los Cauchos zonas de afectación directa comprenden sectores críticos por pendientes fuertes y de gran longitud, y/o por inestabilidad de sus terrenos. Dado lo anterior, se consideró que las familias ubicadas en estas zonas deben reubicarse. [14]
De igual manera, se presentan conflictos por el uso del suelo de tipo medio-alto. “La principal función de esta zona es mitigar la presión sobre las Zonas de Preservación de Ecosistemas Estratégico para la regulación hídrica y conservación de la biodiversidad o área de reserva conformada por La Siberia y Santa Rosalía”
Las actividades productivas de la zona media y alta de la cuenca actualmente se basan en la potrerización, el cultivo anual de fríjol, cacao en las vegas y en algunas partes caña panelera para autoconsumo y piscicultura. Esta unidad de manejo cubre la parte media y alta de las veredas Pueblo Nuevo, Santa Elena, El Vergel, Los Cauchos, y algunos sectores de las veredas Santa Bárbara, Santa Lucía, Platanillal, Ceibas Afuera y la zona baja de Floragaita.
La habitante de la vereda Platanillal y a su vez ex presidenta de la Junta de Acción Comunal, la señora Luz Marina Castro considera que,“ En las veredas de Santa Bárbara, Santa Helena, el Vergel, los Cauchos, Floragaita, Ceibas Afuera, el Centro, Platanillal y Venadito se presentan problemáticas como el uso continuo de quemas lo que generó una pérdida de la fertilidad, a su vez se han incrementado la presencia de plagas y enfermedades en la comunidad así como contaminación en la cuenca por la presencia de desechos de las porquerizas y el sacrificio de aves”.
A su vez aseguró que se presentan: “Viviendas en mal estado y en alto riesgo de derrumbarse con falta de cobertura del acueducto y de gas, contaminación por residuos sólidos, escasa participación de la mujer (inequidad de género) y a su vez ausencia de educación de calidad para los niños y la comunidad, mal estado de las vías, falta de espacios deportivos lo que requiere, entre otros factores son algunas de las problemáticas sociales y familiares de los habitantes de la cuenca que requieren la participación activa del Estado para mejorar las condiciones de la cuenca y que su comunidad sienta que no ha sido olvidada” .
Por otra parte, Javier Cardoso Gutiérrez, declaró durante la entrevista realizada por Crudo Transparente que la exploración que se pretendía realizar afectaría zonas de amenaza alta de origen hidroclimático y geomorfológico con un área de 168,78 hectáreas y un porcentaje en cuenca de 8,50% que así como zonas de producción agroforestal clima seco relieve escarpado con un área de 129,90 hectáreas y un porcentaje en cuenca de 6,54%, zonas de producción agroforestal clima seco relieve quebrado con un área de 1400,22 hectáreas y un porcentaje en cuenca de 70,53%, zonas de recuperación ambiental preservación rondas hídricas con un área de 267 hectáreas y un porcentaje en cuenca de 13,45% y zonas de recuperación ambiental preservación recargar acuíferos y nacimientos de agua con un área de 19,41 hectáreas y un porcentaje en cuenca de 0,98%.
ACUÍFERO EN EL HUILA: UN TESORO PARA LAS GENERACIONES FUTURAS
La presencia de un acuífero ubicado en el sector nororiental de la cuenca del río Magdalena fue la razón principal expuesta por la CAM para impedir procesos de exploración y explotación en la cuenca del río las Ceibas. Principalmente porque las aguas subterráneas son importantes reservas de agua dulce con una menor susceptibilidad a procesos de contaminación y degradación en comparación con las fuentes superficiales. Contienen más del 95% del agua dulce disponible del planeta y la mayoría de ellos son transfronterizos. Para Ofelia Tujchneider, doctora en geología y miembro del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina existen 50 veces más volumen de agua dulce subterránea que de agua superficial.
“El acuífero presente debajo de la ciudad de Neiva tiene más caudal que el mismo río Magdalena y viene desde la zona de Gigante, Hobo, Campoalegre, Neiva y se expande Tello, Baraya. Es una zona de recarga tanto para el Magdalena como para la realización de posibles pozos subterráneos para el mismo autoconsumo” afirmóJavier Cardoso Gutiérrez.
En efecto, la disminución del caudal y el agotamiento de la fuente hídrica en este caso la cuenca de río las Ceibas ocasionado principalmente por la creciente demanda del recurso hídrico, ha generado que sea cada día más importante el uso del agua subterránea para suplir las necesidades de la población, por ende se acrecenta sustancialmente la creación de pozos profundos y aljibes con el ánimo de hacer uso del mismo.
¿QUÉ PASÓ EL 1 DE DICIEMBRE DEL 2017?
El 6 de mayo del 2014 se reunió el Congreso de la República, citado por los Senadores Huilenses, a una Audiencia Pública Senatorial motivados por la invitación del Comité Cívico de unirse a su objetivo. Durante el desarrollo de la misma estando presentes el Presidente de la Agencia Nacional de Hidrocarburos y el Ministerio de Minas, el Representante Legal de Alange Energy entrega un documento fechado el 21 de abril donde le solicitaba a la Agencia Nacional de Hidrocarburos terminar el contrato VSM-13 teniendo en cuenta el punto de vista social, ambiental y técnico, no existía viabilidad para el desarrollo de las actividades exploratorias mínimas establecidas, lo cual se traduce en la imposibilidad fáctica y jurídica de cumplir con los compromisos, pues se requiere el apoyo de la comunidad y el permiso de las organizaciones ambientales para ejecutar el posible.
El 28 de mayo del 2014, dada la presión ejercida desde el Congreso de la República y los debates entre la comunidad, el gobierno nacional y la multinacional, se rescindió y liquidó por mutuo acuerdo el contrato entre la empresa Alange Energy Corp. y la Agencia Nacional de Hidrocarburos.
Más aún el gobierno municipal mediante decreto 333 del 7 de abril del 2015 declaró el 10 de abril como el día de la Cuenca Hidrográfica del Río las Ceibas, para generar cultura ciudadana, incrementar el sentido de pertenencia, exaltar el valor cívico del pueblo neivano en la defensa de esta importante fuente hídrica.
Finalmente, tres años, específicamente el 1 de diciembre del 2017 el Congreso Municipal aprobó el proyecto de blindar el río las Ceibas contra la exploración y explotación petrolera.
Proyecto de acuerdo de auditoría llevado a cabo por la concejal Leyla Rincón en compañía del concejal Mateo Trujillo, con 10 votos positivos y uno negativo. Este último ejercido por el concejal Mauricio Fernando Rojas quien consideró que no era jurisdicción del cabildo realizar esta prohibición, para el concejal el ente territorial que en este caso es el Alcalde de Neiva era el indicado para realizar esta acción. Incluso el concejal Juan Carlos Ramón consideró que aprobar el proyecto de ley podría ser contradictorio pues en la cuenca se realizan actividades mineras contempladas como una actividad legal.
“Nosotros los concejales que votamos este proyecto de acuerdo, de alguna manera estamos asumiendo un riesgo legal, que es el riesgo de entrar a determinar, cosas que son discutibles jurídicamente, en criterio de quienes vamos a tomar la posición, pues prevalece el concepto de autonomía que tenemos como organismo que delibera y discute asuntos y especialmente que tiene la facultad política de establecer el uso de suelo, pero como lo dijo el secretario el uso de suelo lo establecemos bajo el plan de ordenamiento territorial y no de acuerdos sueltos”, expresó.
El concejo municipal solicitó ante el ente territorial que se incorporara la prohibición del presente acuerdo en el Plan de Ordenamiento Territorial y hacer lo mismo con el Concejo de Cuenca para que lo integre al Plan de Manejo y Ordenación de la Cuenca Hidrográfica del Río Las Ceibas, iniciativa aceptada y que fue vista por la comunidad huilense como un inicio de transformación y de empoderamiento de lo público.
CONCLUSIÓN
El proceso de protección de la cuenca hidrográfica del río las Ceibas fue bastante extenso y tedioso pero significativo para la sociedad civil pues el objetivo de la población se logró y expresó en la multitudinaria marcha del 10 de abril del 2014. Donde todos los estamentos de la sociedad se volcaron las calles de Neiva para exigir la suspensión de la licencia de exploración, fortalecer las políticas oficiales y cívicas de conservación de la cuenca e impulsar el trabajo de atención a la población radicada sobre la zona. Hecho considerado histórico pues fue la primera vez que la población opita se unió por un mismo fin.
Desafortunadamente la intención de exploración y explotación petrolera en la cuenca del río las Ceibas es uno de los casos que no deberían presentarse considerando que este río es uno protegidos del país por el Plan de Manejo de Ordenación y manejo de la Cuenca del Río Ceibas- POMCH principalmente por su composición geológica, características socioeconómicas de la población aledaña y los antecedentes de vulnerabilidad y riesgo.
Durante el desarrollo de la oposición de la sociedad civil se pudo evidenciar una dificultad para articular el gobierno nacional, los entes territoriales, las instituciones y la comunidad en torno a una gestión tendiente al desarrollo sostenible de la región, así como la ausencia de métodos apropiados que logren involucrar a la comunidad en la toma de decisiones teniendo en cuenta que es fundamental su participación durante el desarrollo de las actividades de tipo extractivo.
Desde la oferta del bloque VSM-13 en ronda colombiana 2010 se conocía de primera mano las implicaciones que traería consigo realizar actividades de exploración y explotación de hidrocarburos en una cuenca que abastece de agua a cerca de 400000 mil habitantes y que estaba protegida por el POMCH. En este punto tanto la Agencia Nacional de hidrocarburo como la empresa Alange Energy debieron ajustarse a la realidad del territorio; identificar adecuadamente los riesgos suponiendo que el destino de la explotación estaba ligado al entorno en el que se desarrollan, conociendo de manera integrada las características y dinámica socio-políticas en el que se desarrollan las actividades, sin desconocer la importante de los entes territoriales.
En definitiva, se requiere un compromiso por parte de la organización de reconocer y respetar los derechos fundamentales irrenunciables e inalienables, así como cumplir la legislación vigente en las decisiones y acciones de la organización construyendo una autorregulación ética y fomentando el desarrollo sostenible creando oportunidades de diálogo con las partes interesadas y fomentando la contribución de estas. Por su parte, la comunidad debe articularse en las fases de planeación, acciones socio-económicas y ambientales así como apropiarse de los programas y proyectos en materia de exploración y explotación de hidrocarburos Finalmente el Estado debe identificar las susceptibilidades, potencialidades y oportunidades, y aportar soluciones y métodos, con prácticas y actividades locales orientadas a su sostenibilidad fomentando el desarrollo económico regional pero aportando al relacionamiento entre la comunidad, la empresa y el Estado haciendo velar la normatividad vigente.
RECOMENDACIONES
Empresa: Deben realizar sus negocios en el marco de la Responsabilidad Social Empresarial para que, logren demostrar su compromiso con las regiones en donde establecen sus operaciones, para ello están en la obligación de realizar una socialización a la comunidad sobre su misión. Lo anterior con el fin de crear una colaboración colectiva ue logre promover el desarrollo local entre los los tres ente que genere una perspectiva incluyente y participativa.
Comunidad: Es importante que mantenga activa su participación para que logre exponer las condiciones sociales, económicas y ambientales a las que se enfrentan y de esta manera ayudar a que la empresa y el gobierno los identifique para dar respuesta a sus expectativas, inquietudes e intereses. A su vez deben entender la participación como un proceso consultivo, abierto y constante.
Gobierno: Debe asegurar la participación de los dos entes mencionados conforme a los preceptos constitucionales respetando el marco legal y de políticas, asumir las expectativas, incentivos y sanciones a empresas, así como analizando el contexto en el que se desarrollarán las actividades extractivas con el ánimo de divulgar información relevante para las empresas y la comunidad que promueva la transparencia y genere sostenibilidad.
BIBLIOGRAFÍA
[1] y [2] Plan de Ordenación y manejo de la cuenca hidrográfica río las Ceibas. Recuperado de https://www.cam.gov.co/recurso-hidrico/pomch/category/85-rio-las-ceibas.html
[3] Diagnóstico cuenca hidrográfica río las ceibas Neiva, Huila. Tomo III Capítulo IV Caracterización de las condiciones socioeconómicas.
[4] y [5] Exploración petrolera en Las Ceibas es inconveniente: CAM. Recuperado de http://www.lanacion.com.co/2013/07/16/exploracion-petrolera-en-las-ceibas-es-inconveniente-cam/
[6], [7], [11] y [12] Plan de desarrollo Corregimiento Río las Ceibas.
[8] [9] y [10] Plan de Ordenación y manejo de la cuenca hidrográfica río las Ceibas y Diagnóstico cuenca hidrográfica río las ceibas Neiva, Huila. Tomo III Capítulo IV Caracterización de las condiciones socioeconómicas.
[13] Evaluación del riesgo ambiental y social por amenaza de explotación de hidrocarburos: caso de Estudio río las ceibas- Huila. Diana Cerón Vanegas, Dayhana Gómez Santos. Recuperado de http://www.anh.gov.co/Sala-de-Prensa/Documents/Forms/AllItems.aspx
[14] Diagnostico cuenca hidrográfica río las ceibas Neiva, Huila. Tomo IV capítulo VII Zonificación.
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