Bogotá, Colombia
03 de noviembre de 2015
Investigación:
Petróleo y posconflicto
Investigación completa en: www.crudotransparente.com
¿Cuál es la paz que queremos? En caso de firmarse, las problemáticas de los territorios en donde hay yacimientos girarán en torno a las necesidades básicas insatisfechas en un ambiente social que naturalmente se ha caracterizado por voladuras, secuestros y derrames, con un adicional, un vacío de poder donde podrán prosperar bandas criminales. Pronóstico: si no se tiene un dialogo nacional con las regiones sobre los recursos y su papel en el posconflicto, no llegará la paz territorial.
Crudo Transparente invita a los medios de comunicación a abrir el debate y a difundir la importancia del mismo, a través de sus reportajes, espacios de análisis y líderes de opinión para evaluar un posible escenario de posconflicto y el papel de la industria petrolera tanto para el financiamiento de iniciativas de paz, el mejoramiento de proyectos de responsabilidad social empresarial, la creación de empleo local para combatir la pobreza, la ampliación de los territorios de extracción, como también, la posibilidad de hacer parte de las comisiones de la verdad, dada su alta presencia e influencia en territorios con presencia armada.
La paz va más allá de un acuerdo y se debe aprovechar este momento para impulsar una discusión nacional sobre el papel de los recursos naturales en esta coyuntura histórica.
Así, en la investigación Petróleo y posconflicto, nuestro investigador aliado Sergio Guzmán se interesa por el posible escenario de paz, tras las negociaciones que dieron inicio en 2012 con las Farc y la relación con la industria del petróleo como un motor principal de la economía nacional, donde sugiere ciertas recomendaciones para que la firma de la paz, no tome desprevenido a los actores involucrados.
Sabemos que la industria petrolera, el ELN y las Farc se muestran contrarios a la presencia de compañías multinacionales en los territorios y reclaman una agenda nacional que dé prioridad al medioambiente, la soberanía energética, la redistribución de la participación social en la producción y consumo energético, el desarrollo tecnológico nacional y el fortalecimiento de la actividad gremial y sindical. Contrastan estas actitudes hacia la industria con los actos que cometen estos grupos como: voladura de oleoductos, que causan graves daños ambientales, económicos y sociales; al igual que las acciones extorsivas y secuestros contra los empresarios y trabajadores del sector, todo para “golpear la confianza inversionista”, explica Luis Eliecer Rueda; alias Matías Aldecoa, desde La Habana.
Dada las tensiones entre sectores y la meta de aportar a un escenario constructivo de paz, las recomendaciones son las siguientes, según Sergio Guzmán:
Gobierno:
- Convocar a las distintas partes a un diálogo nacional sobre la industria petrolera y sus beneficios.
- Considerar beneficios tributarios para empresas que presenten proyectos de posconflicto que vayan alineados con los Programas de Beneficio a las Comunidades
- Evitar la relación social asimétrica. Desarrollar mecanismos de comunicación efectiva y preparación para las comunidades que recibirán reinsertados, con el objetivo de generar espacios de reconstrucción de tejido social entre excombatientes y civiles.
Empresas petroleras:
- Diseñar estrategias para discutir y formular proyectos de desarrollo integral regional a ser implementados durante el período de estabilización del posconflicto, que estén alineados con los acuerdos de La Habana. Antes de desarrollar iniciativas de posconflicto locales, se deben hacer proyectos piloto para verificar el seguimiento de los objetivos y aprender importantes lecciones de implementación a ser compartidas por toda la industria.
- Diseminar públicamente las posiciones de la industria petrolera frente a las negociaciones que actualmente se realizan en La Habana. Si la industria petrolera sería una de las grandes beneficiadas de que cesen los ataques contra la infraestructura petrolera, ¿por qué no apoyar abiertamente una salida negociada al conflicto?
- Firmar convenios de colaboración con la Agencia Colombiana de Reintegración para entender formas en las cuales la industria puede unirse a las iniciativas de reintegración de desmovilizados.
Comunidades
- Diseñar proyectos de desarrollo sostenible local que puedan ser presentados a los OCAD (Órganos Colegiados de Administración y Decisión) para financiar obras de beneficio social, articulando las visiones de desarrollos territoriales y alineados con las comisiones de paz, de las empresas petroleras. Articular estos proyectos en conjunto con las entidades territoriales para que los planes de desarrollo, planes o esquemas de ordenamiento territorial sean convergentes con las necesidades y prioridades comunitarias.
- Formar espacios de representación democrática e interlocución permanente con las empresas que tengan la capacidad de articular prioridades a las entidades territoriales. Que estos espacios sean transparentes en cuanto a los objetivos de desarrollo y coherentes con estos en los pliegos de peticiones presentados a las empresas antes de llegar a las vías de hecho.
Para más información, agendar una entrevista o contacto por favor comunicarse con:
Andrés Vargas Ferro
(571) 7464762
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