AGOSTO 05 DE 2019: BOLETÍN DE LA INDUSTRIA PETROLERA

Columna de opinión semanal

El petróleo es la sangre de la tierra

Para el capitalismo las comunidades se vuelven protagonistas sólo cuando son objeto posible de alguna ganancia bajo un modelo de explotación de los recursos naturales y la democracia  juega en función del desempeño económico, que no siempre representa los intereses de ciudadanos vulnerables. 

No obstante, hay casos especiales en donde la historia presenta unos puntos de giro que permiten que empiece a ser contada de otra manera y Ecuador es un ejemplo de esto. Un fallo, a mediados del mes pasado, reconoció el derecho a los indígenas Waorani de conducir su territorio con autonomía, frenando la explotación petrolera en una zona amazónica de 180.000 hectáreas.

A muchos indígenas les importa lo que va por dentro y lo quieren mantener allí, creen según su cosmovisión que el crudo es la sangre de la tierra y que por ningún motivo debería ser sacado y menos expulsado a la atmósfera en forma de dióxido de carbono, ya que esto envenena de forma radical, el cielo. “La naturaleza está formada por una multitud de entidades vivas con las que no podemos perder el contacto ya que son necesarias para el mantenimiento del equilibrio tanto local como planetario… tiene una vida propia, los ríos, las lagunas, las montañas, los árboles y todo lo que existe en la naturaleza tienen una vida propia. Atentar contra ellos significa ocasionar con imprudencia un irreversible desequilibrio”, Sabino Atanacio Gualinga Cuji, representante Yachak de la comunidad kichwa de Sarayaku (Ecuador).

Ahora bien, según la publicación Petróleo e Indígenas en Colombia, de la Universidad del Rosario, identifica la reprochable situación de fragilidad dentro del espectro de los pueblos originarios en tanto: “Los indígenas son protagonistas de buena parte de los proyectos de explotación minera y especialmente de explotación petrolera, proyectos que producen una fuerte intervención en el medio ambiente y que representan una amenaza para la forma de vida de las comunidades y en algunos casos para su supervivencia”.

La Organización Nacional Indígena de Colombia expone una población de 1´378.884 en resguardos, que podrían encontrarse por fuera de la protección del Estado. Todos con necesidades culturales especiales y unos más vulnerables que otros, por estar en un alcance posible del sector extractivo. Nomás la Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana, OPIAC, advierte que en los planes de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) se superponen 37 contratos petroleros, frente a 81 resguardos indígenas, con un especial énfasis en la región de prospectividad petrolera Caguán-Putumayo -parte nororiental de la amazonía, la misma zona donde los Waorani obtuvieron su reciente victoria.

Se debe resaltar que la Constitución colombiana en el artículo 330 especifica: “La explotación de los recursos naturales en los territorios indígenas se hará sin desmedro de la integridad cultural, social y económica de las comunidades indígenas. En las decisiones que se adopten respecto de dicha explotación, el Gobierno propiciará la participación de los representantes de las respectivas comunidades” y la pregunta es entonces ¿qué tanto debe aprender nuestro Estado del ejemplo de Ecuador? Si la protección es un derecho.

La sangre de la tierra además de ser parte de una cosmovisión es una realidad y una gran deuda histórica con la población indígena de Colombia. Maria Isabel Escobar, investigadora de la Universidad de Laval – Quebec y vinculada por 12 años en programas de relacionamiento social del sector explica, en su libro Petróleo y Comunidad, por ejemplo, que: “Hacia 1958 se realizó la mayor ofensiva contra estas comunidades con renombrados enfrentamientos por demás desiguales, pues mientras los indígenas utilizaban sus flechas, las fuerzas armadas colombianas y los grupos de seguridad de la empresa empleaban armas de fuego. Esto produjo la destrucción de nueve comunidades indígenas y una población diezmada y desplazada”.

En la actualidad hay unos privilegios mediados por la Constitución del 91, que esperan protegerlos de las barbaries del siglo XX. No obstante, aunque el reconocimiento está escrito en la carta magna, la historia también cuenta otros modos de agresión que se pueden presentar contra una comunidad ancestral, por ejemplo, el desplazamiento humano por la delimitación del área de influencia de un proyecto extractivo, la modificación de los paisajes, el ingreso disruptivo de empleados asociados al sector, distinto a sus modos tradicionales de vida (y en donde se sabe que donde hay economía petrolera, se puede presentar una tendencia al aumento de la prostitución y consumo de alucinógenos).

Es prioritario entonces una explicación más abierta de la ANH sobre esas pretensiones para entender y compensar la deuda de sangre con estas comunidades y así dar un lugar privilegiado al patrimonio vivo -socio-cultural colombiano. Lo anterior sobre un escenario regional que exige cambios en el reconocimiento de las poblaciones vulnerables más allá de la consulta previa, estipulada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y con los referentes regionales como el del Ecuador, donde fue claro cómo el valor cultural primó sobre el energético, en las formas de priorizar las relaciones del Estado con sus ciudadanos. 

Noticias

Suspenden actividades laborales en Campo Tibú

En Norte de Santander más de 365 trabajadores asociados al sector de hidrocarburos se encuentran en un cese de actividades debido a que Ecopetrol frenó las operaciones en la zona, por una alta tendencia delincuencial de contrabandistas de gasolina y asaltantes, los cuales se conocen como “pategrilleros”.

La situación se presentó desde el pasado 27 de julio y se mantendrá hasta que las autoridades garanticen las condiciones necesarias para continuar con las labores. 

El presidente de Ecopetrol, Felipe Bayón, se manifestó con respecto a los actos delictivos que vienen ejerciendo los “pategrilleros” en la zona:  “Afecta sobre todo a las comunidades, y el agua, para sus animales y sus cultivos. Desde 1986, estimamos se han derramado más de 4 millones de barriles de crudo al ecosistema y eso es lo que el país debe rechazar”.

El escenario más desolador se evidencia en las afectaciones que ha sufrido la naturaleza, puesto que 4.000 metros de suelo y de fuentes hídricas se han contaminado. 

En este contexto, una arremetida en contra de la infraestructura petrolera se presentó en la Vereda La Cuatro y ocasionó que durante 4 días se enfrentaran con la Fuerza Pública, lo que generó incendios dentro de las instalaciones, debido a la agresión con granadas. 

La economía regional se encuentra gravemente afectada. Ecopetrol pide a las autoridades locales, regionales y nacionales, que efectúen estrategias que aseguren el perfecto desarrollo de las actividades operacionales. Adicionalmente, se informó que los contratos con las Juntas de Acción Comunal en parte del Catatumbo, se encuentran detenidos. De igual forma, convenios por 1.200 millones de pesos (mes) con unos 66 proveedores que se encargan de ofrecer servicios de transporte, alimentación, hospedaje y aseo.


Vía El Tiempo: Catatumbo sufre grave recesión económica por parálisis de Ecopetrol y  El Tiempo: Violencia tiene paralizadas operaciones de Ecopetrol en el Catatumbo.

Tras visita de Duque, China reafirma relación con Colombia

Foto: Presidencia

Con la visita del presidente Iván Duque a China se llevaron a cabo varios acuerdos internacionales. En primera medida se buscará trabajar en la asistencia técnica para la generación de energías limpias, con el fin de lograr la meta de 1.500 megavatios estipulada por el actual Gobierno, señaló la Ministra de Minas y Energía -María Fernanda Suárez.

Suárez dio a conocer que el Gobierno chino donará 3.000 paneles solares, los cuales se destinarán a 1.500 viviendas. “Está previsto que los paneles lleguen en el segundo semestre de 2019 y beneficien a 500.000 familias. De la selección y distribución a los favorecidos será el Departamento de Prosperidad Social y estamos viendo que lleguen al Catatumbo o La Guajira, donde hay déficit rural”.

Por otro lado y no menos importante, el ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, mencionó que se firmó un acuerdo para que las Pyme de China y Colombia exporten comercio electrónico. “Tenemos que aprender de China en esa materia, y con esto rediseñamos una política pública de comercio electrónico para propiciar el intercambio de productos”.

Vía La República: Empresas chinas invertirán en energías renovables y en emprendimiento. 

Derrame de crudo en zona ribereña del río Magdalena

Imagen referencia derrame. Foto: Vanguardia

En Yondó (Antioquia) se presentó un derrame de crudo en zona ribereña del río Magdalena, generando otra deuda ambiental. Ecopetrol activó un plan de contingencia para detener la afectación y mitigar el daño. 

Sin embargo, el dueño del predio afectado Ladislao Carvajal mencionó que no es la primera vez que se registra una situación así, es más, según él hace 8 días se presentó el mismo flujo de crudo, en uno de los cuerpos de agua de la zona.

Por su parte, Fernando Lapania, gerente del Río de Ecopetrol, afirmó que se presentaron manchas de petróleo que llegaron a las corrientes hídricas, aunque, las mismas fueron detenidas por las barreras localizadas, 50 metros abajo del incidente. 

Ecopetrol delegó a 46 personas, 4 barreras y 2 camiones para mitigar los daños, no obstante, la comunidad asegura que este tipo de contaminación en la región, viene de años atrás. 

De acuerdo a la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla), “la Inspectora Regional realizó la visita junto a representantes de la Alcaldía de Yondó y de Corantioquia, quienes esperan un “muestreo” por parte de Ecopetrol para determinar las técnicas a ser implementadas para la recuperación ambiental”.

Vía Noticias Caracol: Comunidad de Yondó denuncia derrame de petróleo a orillas del río Magdalena y Rcn Radio: Anla revisa daños ambientales tras derrame de petróleo en Yondó, Antioquia

Fracking: Ecopetrol firma convenio con Oxy

La Estatal petrolera ingresa al mundo de los yacimientos no convencionales gracias a un acuerdo realizado con OXY, una de las compañías petroleras más grandes de Estados Unidos. La alianza comercial equivale a US$1.500 millones y se ejecutará en alrededor de 39.000 hectáreas de la cuenca de Permian por 10 años (entre Nuevo México y Texas), la misma se caracteriza por ser la fuente de extracción más grande del mundo.

De acuerdo a lo que dio a conocer Ecopetrol, contará con un 49% de participación (por parte de la Estatal), mientras que OXY tendrá el 51%, siendo la operadora. Por su parte, el proyecto se financiará el 50% al cierre del negocio y el otro 50% será diferido en el periodo de ejercicio considerado por el Plan de Desarrollo.

Felipe Bayón, presidente de Ecopetrol mencionó que: “Este es un hito para Ecopetrol, porque ingresamos a las grandes ligas de los yacimientos no convencionales, aumentaremos nuestras reservas y producción, y afianzaremos nuestro conocimiento en esta tecnología junto con un socio de primer nivel”. 

Con el fin de llevar a cabo el plan con OXY, se creó Ecopetrol Permian LLC asociación que se encargará de todos los proyectos relacionados con los yacimientos no convencionales, la cual estará liderada por Ecopetrol USA Inc. El principal objetivo reside en lograr aumentar la producción en hasta 95.000 barriles diarios, para el año 2027.

Lo anterior es una jugada de fondo para que la empresa aumente su curva de aprendizaje sobre los yacimientos no convencionales y muchos expertos lo consideran como la antesala para operarlo en Colombia. Hoy en día Ecopetrol cuenta con reservas de 1.727 millones de barriles de petróleo y del total de la compañía, el 70% son de petróleo, mientras que el 30% son relativas al gas. La duración de las mismas corresponde a 6,3 y 11,1 años respectivamente. Aunque es importante destacar que se ha presentado un aumento de un 9%, puesto que el anterior informe de reservas de petróleo expone un total de 5,8 años. 

Vía El Espectador: En Estados Unidos, Ecopetrol entró a las grandes ligas del “fracking”.

La Guajira: pacto por la legalidad con los pimpineros

Por primera vez el Ministerio de Trabajo, Cancillería, Sena, Policía Fiscal y Aduanera de la Dian (Polfa) y la Asociación Nacional de Pimpineros se reunieron en el corregimiento de Cuestecitas (La Guajira), para firmar un acuerdo apostándole a la reconversión laboral de los pimpineros, hacia actividades dentro de la legalidad. 

Lo anterior en tanto el departamento es considerado como uno de los mayores puntos de comercialización de gasolina de contrabando.

En la reunión se lideró la propuesta de buscar la transformación laboral de alrededor 300 personas que se dedican a la actividad ilegal. La iniciativa se conoce como “Entornos para crecer – hacia una economía dinámica, incluyente y sostenible que potencien todos nuestros talentos”.

Arlium Ferney Rojas Real, jefe de la Polfa, explica lo que se pretende lograr en la zona: “No que la reconozcan por ser ícono de la ilegalidad, si no por su cambio a una zona legal con la formalización de sus habitantes y en el que los grandes ganadores y protagonistas son los ciudadanos miembros de la Asociación Nacional de Pimpineros de Maicao, Cuestecitas y Porciosa”.

Finalmente, quedó constancia del acuerdo a través de la firma de un documento que aprobaron empresas públicas, privadas, autoridades e integrantes de la Asociación, corroborando el deseo de crear tácticas para transformar el empleo de esta comunidad y enfatizar la legalidad laboral. 

Vía El Heraldo: Reunión histórica entre Pimpineros y autoridades en La Guajira

Columna de opinión regional

El gas en Colombia: paradojas de una bonanza

Danna Rodríguez

En Colombia en los últimos dos años los hidrocarburos han representado el 62% de la fuente de consumo energético. Para el primer semestre del año en curso, la explotación comercial de gas alcanzó los 1.040 Millones de Pies Cúbicos (MPCD), encontrando un aumento de 8,6% con referencia al mismo periodo del 2018. Al mismo tiempo, el Ministerio de Minas y Energías informó que las reservas de este recurso se encuentran en 3.890 Giga Pies Cúbicos (GPC).

En este orden, Rodolfo Anaya, presidente de Vanti -compañía multinacional líder en el sector del gas-, señaló que en la Región Caribe se encuentra el 32% de la existencia de gas del país, principalmente en los departamentos de la Guajira, Córdoba y Sucre. 

Paradójicamente, los municipios de esta región aún no cuentan en su totalidad con gas domiciliario. Las recientes cifras del DANE revelan que Sucre ocupa el puesto número 18 con el 57,6% de cobertura de este servicio, Córdoba el 21 con el 47,1% y la Guajira el 22 con el 40,2%. A nivel nacional esta es la prestación con mayor desigualdad. 

Este escenario genera entre las comunidades de las áreas de influencia de los proyectos gasíferos, inconformismo, rechazo e incomprensión sobre lo que sucede en sus territorios. No se explica cómo siendo ricos en el subsuelo no pueden acceder a este beneficio en sus viviendas. Las poblaciones se ven obligadas a comprar tanques de gas o en el peor de los casos, usar leña; la cual genera afectaciones a su salud, al ambiente y es un riesgo para los hogares.  

Pero ¿a qué se debe la falta de acceso a este servicio? Múltiples serían las razones, la falta de voluntad política de los administradores de turno, la corrupción, la poca o nula presencia del Estado, incluso el olvido del mismo en estas zonas, la dificultad de acceso a los territorios, el poco cumplimiento de una política pública que sea robusta en presupuesto y proyección. 

Si bien muchas empresas de explotación están impulsando proyectos de masificación gasífera, como el caso de Canacol Energy en Córdoba, que busca beneficiar a 1.067 familias con una inversión superior a los $5.495 millones de pesos; aún quedan muchas comunidades a la espera de este tipo de oportunidades. Aunque se resalta la iniciativa de las compañías, es en principio y fin,  responsabilidad del Estado asumir su rol “paternal” y “proveedor”, destinando los recursos y esfuerzos que ello implique. Y no es algo que deba “regalar”, es en sí mismo un derecho intrínseco a las sociedades y una deuda con esos mismos territorios donde se llega a explorar y explotar. Y aunque se han gestado planes desde el orden nacional para ampliar la cobertura, en los últimos años se ha dado un incremento de un 17,6% para zonas urbanas y un 2,9% para las rurales, es evidente que este incremento no es proporcional.

En este sentido, el desafío para el Gobierno Nacional, las instituciones competentes y las compañías es, por un lado, lograr establecer proyectos en conjunto que permitan a las comunidades de donde se extrae el recurso, gozar del beneficio de tenerlo y por otro superar las dificultades o diferencias que han acarreado la vulneración a este derecho. Además, generar condiciones de vida digna y superar las necesidades básicas insatisfechas de las poblaciones debe ser un compromiso y una prioridad liderada desde la agenda de los gobiernos locales y departamentales. 

INDICADORES BRENT & WTI / SEMANA

Por un sector minero-energético abierto, informado y responsable